LAS ARTES MARCIALES – INTRODUCCIÓN

“¡No somos Maestros sin estudiantes, quienes, a la larga, son nuestros mejores maestros!” - Mao

Aunque las artes marciales han sido perpetuadas como una forma de aprender a pelear y defenderse en las películas, revistas, publicidad, etc.; y aunque la mayoría de los estudiantes que se matriculan en las artes marciales entran con el propósito de aprender a defenderse; el verdadero propósito de las artes marciales es ayudar a sus practicantes a convertirse en mejores seres humanos mediante el desarrollo de sus cuerpos y mentes, el aprendizaje del manejo de sus emociones y energías, y el desafío de sus límites físicos, mentales y emocionales. Las artes marciales no son un deporte o un deporte de combate, como tampoco un club de pelea o donde solo se aprende a defenderte o luchar. ¡Por el contrario, es una forma de vida!

Hay una gran diferencia entre los deportes y las artes marciales. Por un lado, mientras que la actividad física y el ejercicio generalmente se practican para la salud o para superar algún tipo de enfermedad o problema de salud, los deportes se practican principalmente para la competición o con algún propósito específico como un título, un récord, un desafío, etc. Los deportes son excelentes y son una gran oportunidad para aquellos quienes los pueden practicar. Son intensos, desafiantes y demandantes y se ocupan principalmente del desarrollo del cuerpo y en parte del desarrollo de la mente. El porcentaje de mente sobre cuerpo depende del tipo de deporte y el nivel practicado.

Aunque lesiones y problemas de salud a largo plazo son comunes cuando se practican deportes debido a los niveles extremos en los que se practican hoy en día, los beneficios de los deportes son inmensos y la mayoría de las personas que los practican se beneficiarán enormemente en todos los aspectos (física, mental y emocionalmente). In general, a medida que envejecemos, la mayoría de los deportes se vuelven cada vez más difíciles de practicar debido a sus demandas físicas.

“No hay estilos malos de artes marciales o malos artistas marciales, solo hay malos instructores. ¡Cualquier arte marcial que enseñe cómo mejorar la vida es un buen arte marcial!” – Mao

Por otro lado, además de los aspectos físicos y mentales de los deportes, las artes marciales van mucho más allá al enfocarse también en los aspectos mentales, emocionales, energéticos y filosóficos de los practicantes y sus vidas. Esto es lo que diferencia a las artes marciales de los deportes de combate y todos los demás deportes. Las herramientas utilizadas son patadas, puñetazos, caídas, saltos, rompimientos, armas, formas, defensa personal, meditación, respiración, etc., pero los subproductos son personas sanas, equilibradas y seguras, listas para enfrentar la vida en todos sus aspectos con respeto, aceptación y humildad.

Aunque la mayoría de las personas quieren practicar artes marciales para aprender a defenderse, para pelear o para competir, al tomar a los estudiantes de la mano y guiarlos paso a paso a través de un proceso bien diseñado, los estudiantes eventualmente cambiarán de opinión y verán el propósito real de las enseñanzas. El resultado son individuos seguros y justos que usan las artes marciales para superarse a sí mismos y ayudar a superar a los demás en todo momento. Al igual que los deportes, hay diferentes estilos de artes marciales para todo tipo de personas. La diferencia es que, aunque algunas artes marciales se concentran en algunos aspectos del arte, como patear, o golpear, o formas, o ..., todas usan todo el cuerpo, la mente, las emociones y las energías. Finalmente, a medida que envejecemos, los artistas marciales solo cambian dinámicamente el énfasis del cuerpo a la mente y el espíritu, completando el círculo entero de la vida y en busca del vacío completo (iluminación o autorrealización).

La vida de los verdaderos artistas marciales adeptos debe ser en, alrededor de, y acerca de, las artes marciales ... sus desarrollos físicos, mentales y espirituales, independientemente de si todavía practican o no. Cada día que viven, deben: ser fieles al código (amor, poder, y sabiduría), pulir sus espadas (compasión y empatía) y estar preparados para cualquier situación (vida y muerte). Aunque pueden o no haber peleado (físicamente), deberían usar todas sus habilidades, conocimientos y experiencias para mejorar sus vidas y las de todos y todo lo que les rodea. ¡Su único enemigo y su única pelea debería ser consigo mismos! ¡Sus únicas armas deberían ser la compasión y empatía! Su única búsqueda debería ser la verdad, su verdadero potencial ... quiénes son realmente. ¡Y su único camino debería ser a través de la experiencia!

"¡Para vivir realmente, debes dejar que tu corazón se exprese en todo y para todo!" - Mao

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Autor: Mauricio Correa
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